Todos sin excepción nos hemos enfrentado a momentos de incertidumbre. Nuestro corazón comienza a latir rápidamente, nuestro cuerpo se tensa tanto que incluso llegamos a sentir dolor en la parte superior de nuestro cuerpo.
Pensar que algo podría salir mal puede afligirnos. Sin embargo, Dios no quiere que vivamos de esta manera y los da las herramientas necesarias para poder enfrentar la incertidumbre de una manera bíblica para llevar la gloria a Dios.